El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, ha expresado su apoyo al plan del expresidente de EE.UU., Donald Trump, para desalojar y reasentar a la población de Gaza, asegurando que está trabajando para convertir la propuesta en «una realidad».
Tras una reunión en Jerusalén con el secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, el domingo, Netanyahu afirmó que Israel y Estados Unidos están cooperando en una «estrategia común» para Gaza. También señaló que él y Rubio discutieron formas de implementar la visión de Trump, que incluye la posibilidad de que EE.UU. asuma el control de Gaza.
Rubio reconoció que el plan había «sorprendido e impactado» a muchos, pero elogió a Trump por ofrecer una alternativa a las «ideas agotadas» del pasado. Este viaje marca la primera visita de Rubio a Medio Oriente como jefe de la diplomacia estadounidense. En los próximos días, tiene previsto reunirse con funcionarios rusos en Arabia Saudita para posibles conversaciones de paz sobre la guerra en Ucrania, un encuentro al que no han sido invitados ni Ucrania ni otros países europeos.
Declaración conjunta de Netanyahu y Rubio
En una conferencia de prensa conjunta el domingo, Netanyahu y Rubio delinearon sus prioridades comunes, entre ellas desmantelar la capacidad de gobierno de Hamás, impedir que Irán obtenga armas nucleares y monitorear la situación en Siria en la era posterior a Asad.
Netanyahu también condenó lo que calificó como «guerra judicial» por parte de la Corte Penal Internacional (CPI), acusándola de difamar «escandalosamente» a Israel. Criticó al tribunal por emitir órdenes de arresto contra él y un exministro de Defensa israelí por supuestos crímenes de guerra en Gaza, cargos que Israel niega. También se emitió una orden similar contra un alto comandante de Hamás.
El líder israelí agradeció a la administración estadounidense por imponer sanciones contra la CPI en respuesta a estas medidas. Además, aseguró que EE.UU. e Israel comparten la misma postura sobre Gaza y advirtió que «las puertas del infierno» se abrirán si no se liberan a todos los rehenes israelíes.
Rubio reforzó esta posición afirmando: «Hamás no puede continuar como una fuerza militar o de gobierno. Mientras sigan gobernando o amenazando con el uso de la violencia, la paz será imposible».
EE.UU. reanuda el envío de armas a Israel
La visita de Rubio coincide con la llegada de un nuevo cargamento de bombas pesadas de fabricación estadounidense a Israel. El sábado por la noche, Israel recibió una entrega de bombas MK-84 tras la decisión de Trump de levantar las restricciones a su exportación, restricciones previamente impuestas por su predecesor, Joe Biden.
Biden había enviado miles de bombas MK-84 a Israel tras el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023, pero posteriormente bloqueó nuevas entregas debido a preocupaciones sobre su impacto en Gaza. Estas potentes bombas de 2,000 libras tienen un amplio radio de explosión y pueden atravesar concreto y metal, destruyendo edificios enteros.
El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, describió la entrega como un «activo significativo» para las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) y como una prueba de la «fuerte alianza entre Israel y Estados Unidos».
Tensión en la tregua: ataques aéreos en Gaza
Mientras tanto, Hamás acusó a Israel de violar el alto el fuego al llevar a cabo un ataque aéreo cerca de Rafah, en el sur de Gaza, el domingo, en el que murieron tres agentes de policía. El grupo calificó la acción como una «grave violación» de la tregua, que entró en vigor el 19 de enero y exige una pausa total en los combates durante los primeros 42 días.
El ejército israelí (IDF), sin embargo, afirmó que había atacado a «varios individuos armados» en el sur de Gaza.
La frágil tregua estuvo al borde del colapso esta semana debido a una disputa sobre la liberación de rehenes, que estuvo a punto de cancelarse, pero que finalmente se llevó a cabo el sábado.
La oficina de Netanyahu confirmó el domingo que un equipo negociador israelí viajará a El Cairo el lunes para discutir la segunda fase del acuerdo de alto el fuego.