Aislado en una casa de playa en Delaware, el presidente Joe Biden sorprendió a sus asistentes y al mundo político al anunciar su retiro de la carrera presidencial de 2024. Sus principales asesores de la Casa Blanca y de la campaña habían insistido durante la semana pasada en que planeaba continuar en la contienda, a pesar de las crecientes llamadas dentro del Partido Demócrata para que se retirara.
Hasta el sábado, los asesores de Biden estaban finalizando un calendario de campaña para su regreso a la Casa Blanca. Recuperándose de COVID-19 en su casa de playa, Biden seguía firme en su campaña de reelección, pero estaba frustrado por un esfuerzo coordinado entre algunos demócratas para presionarlo a retirarse, lo cual comenzó a hacerse público.
Sin embargo, el domingo por la mañana, Biden cambió de opinión. Fuentes que hablaron bajo anonimato detallaron cómo se desarrolló el día. El sábado por la noche, Biden comenzó a contemplar su retiro, una de las decisiones más difíciles de su carrera política de 50 años. Se reunió con un pequeño grupo de asesores, incluyendo a Steve Richetti, su consejero más cercano; Mike Donilon, su estratega jefe; Annie Tomasini, su subjefa de gabinete; y Anthony Bernal, jefe de gabinete de la primera dama Jill Biden.
Richetti, quien ha estado con Biden desde sus días en el Senado, llegó a la casa de playa el viernes. Donilon, otro asesor clave, se unió el sábado. Juntos revisaron nuevos datos de encuestas y discutieron las posibilidades de Biden contra Donald Trump en el clima político actual. Con los nuevos datos y anticipando más deserciones públicas dentro del partido, Biden tenía una decisión que tomar.
El domingo por la mañana, Biden decidió retirarse. Informó por separado a su jefe de gabinete, Jeff Zients; a su directora de campaña, Jen O’Malley Dillon; y a la vicepresidenta Kamala Harris. A la 1:45 PM EDT (5:45 PM GMT), Biden realizó una videollamada con su personal más senior de la Casa Blanca y de la campaña, incluyendo a Anita Dunn, su estratega de comunicaciones. Un minuto después, publicó una declaración pública que sacudió el panorama político estadounidense y trastocó las elecciones de 2024.
«Dijo que había estado reflexionando sobre esto durante los últimos días», dijo un alto funcionario de la Casa Blanca a la BBC. «Fue una decisión muy reservada». Aunque Biden no mencionó a Harris en su declaración inicial, aproximadamente media hora después tuiteó su apoyo para ella. Según fuentes, hablaron varias veces durante el día previo al anuncio.
La primera dama, Jill Biden, considerada una influencia decisiva en la decisión de Biden, expresó su apoyo a su retiro. «Hasta las últimas horas de la decisión que solo él podía tomar, ella apoyó cualquier camino que eligiera,» dijo Elizabeth Alexander, directora de comunicaciones de la primera dama. «Ella es su mayor creyente, campeona y siempre está de su lado, de esa manera confiable que solo un cónyuge de casi 50 años puede ser.»
Muchos en la Casa Blanca y en la campaña no estaban informados de los planes de Biden con anticipación y se enteraron por la publicación en las redes sociales. Zients confirmó el anuncio a los funcionarios de la Casa Blanca y les agradeció por su arduo trabajo, liderando también una llamada con los secretarios del gabinete del presidente. Biden habló con varios demócratas del Congreso, gobernadores y partidarios, y planeó continuar haciendo llamadas el domingo por la noche y el lunes.
Kamala Harris, ahora buscando asegurar la nominación presidencial, pasó la tarde del domingo reuniendo apoyo de legisladores, incluido el líder de la minoría de la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries, funcionarios clave del partido y gobernadores. Aunque ya cuenta con el apoyo de Biden y de los principales demócratas, su nominación no está garantizada hasta que los delegados voten en la Convención Nacional Demócrata en agosto. Cabe destacar que el expresidente Barack Obama no la ha respaldado explícitamente, mientras que Bill y Hillary Clinton sí lo han hecho.
Durante una llamada de campaña el domingo por la tarde, cuando muchos aún estaban asimilando la noticia, los principales funcionarios dijeron que el equipo estaría «a toda máquina» detrás de Harris. «Todos ustedes, todos nosotros, vengan de donde vengan, estamos aquí por Joe Biden y Kamala Harris y para derrotar a Donald Trump. Y aunque hoy es un gran día de transición, nada cambia con respecto a por qué llegaron aquí y qué estamos aquí para hacer,» dijo O’Malley Dillon, según una fuente.
«Pero el camino hacia adelante es un camino que debemos recorrer juntos.»
